Una manera de apreciar la evolución de las sociedades y sus mentalidades es el papel que en ellas juegan los llamados “valores postmaterialistas”, en contraste con aquellos vinculados a la “vida material”, en la expresión del historiador Fernand Braudel. De hecho, algún analista de las motivaciones respectivas de Felipe González y de Rodríguez Zapatero en España distinguía en el primero, a propósito de cumplirse dos años de la recuperación del gobierno por los socialistas, la preocupación esencial por la “supervivencia”, que se tradujo en la construcción en España de un amplio Estado de Bienestar (con un uno por ciento anual de incremento de la carga tributaria respecto al PIB en 12 años, según datos de la OCDE, para ilustración de los admiradores liberales de Felipe), y de la modernización productiva dolorosa en el marco de la integración a Europa. En el segundo, en cambio, y en la generación que lo acompaña, establecidas las bases del bienestar económico, se encarnaría una motivació